El sueño finalmente se está cumpliendo. Los Papas del siglo XX solo podían sonar en la restauración de Roma como el más importante súper-poder mundial. Ella ha sido reconocida por los líderes mundiales, como el más importante mediador internacional de política, por sobre los Estados Unidos. Bajo el reinado del anticristo, a nadie se le permitirá nublar la autoridad del papado. Ha llegado el día cuando todo el mundo—paganos, Musulmanes, Cristianos, Judíos, y aún los no religiosos—han reconocido al papado tanto como gobernante espiritual como temporal.
“Estos tienen un mismo propósito, y le darán su poder y su fuerza a la bestia. Estos harán Guerra con el Cordero, y el Cordero los vencerá”. Apocalipsis 17:13,14. ¡Alabado sea el Señor por esto!
Los reyes de la tierra ciertamente le están dando su poder y su fuerza a la bestia. Roma ahora posee influencia a escala global, la cual puede beneficiar o dañar cualquier sistema político o económico.
Con su asistencia ella puede sostener a cualquier líder mundial, o a través de su hostilidad los puede destruir. Todo esto es hecho a través del engaño.
“Y con su sagacidad hará prosperar el engaño en su mano y en su corazón se engrandecerá, y con paz destruirá a muchos: y contra el Príncipe de los príncipes se levantará; mas sin mano será quebrantado”. Daniel 8:25.
El Papa implementa sus políticas a través de sus cardenales, obispos, sacerdotes, y sus 1.2 billones de adherentes [65 millones en los EUA] los cuales se encuentran en cada rincón del mundo. No es ninguna maravilla que todo el mundo vaya a Roma para coordinar sus operaciones con las del Vaticano. Ellos lo hacen sabiendo que el Vaticano puede ser un aliado peligroso o un enemigo peligroso. Así, es necesario que los líderes mundiales cultiven una sociedad con Roma para asegurarse un éxito político. Y al hacer eso, están colocando a la Iglesia Católica Romana por sobre todas las demás denominaciones religiosas del mundo. Al enviar embajadores y garantizar un estado diplomático con el Vaticano, los gobiernos mundiales lo han colocado como una orden religiosa a la par con ellos mismos, y al actuar así, están reconociendo su supremacía. Los Adventistas del Séptimo Día, como estudiantes de la profecía, ven un cumplimiento de Apocalipsis 13:3,4; cuando la Palabra de Dios declara que “todo el mundo se maravilló en pos de la bestia” y “¿quién es capaz de hacerle la guerra?”.
Dios querría que ellos fuesen a Él en busca de guía y no tras el hombre. Si nuestros líderes mundiales se humillasen a sí mismos y orasen, si buscasen la justicia de Dios, si se alejasen de sus malos caminos, entonces aparecerían las soluciones reales y permanentes. “Si mi pueblo, que se llama por mi nombre, se humillase, y orase, y buscase mi rostro, y se volviese de sus malos caminos; entonces yo oiría desde el cielo, y perdonaría su pecado, y sanaría su tierra”. 2 Crónicas. 7:14.
Ya que el Papa es la cabeza de una maquinaria diplomática global, él puede influenciar en las políticas, apoyar u oponerse a gobiernos, y formar alianzas. Recuerde, el Vaticano no posee parlamento, congreso, o senado que pueda limitar y restringir los poderes de una nación. Por lo tanto, el Papa es un gobernante absoluto y autocrático, que ejerce un poder sin control en su monarquía de iglesia-estado. Y él va a usar ese poder para ejercer cualquier influencia que pueda usar para la promoción de sus doctrinas—el vino de su fornicación. “Y la mujer que has visto es la gran ciudad, que reina sobre los reyes de la tierra”. Apocalipsis 17:18.